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Sin juego, Argentinos perdió merecidamente con Central

Por: Esteban Perisset - Fue 2-1, con goles de Abreu, de penal, y Carrizo; Boyero empató transitoriamente para Argentinos, que nunca supo cómo jugar el partido y fue superado por el elenco rosarino. Argentinos cierra el 2013 en descenso directo y ¿sin técnico?



Era el partido para cerrar el año con una sonrisa. Para llegar a los 28 puntos, una cifra cercana a la mitad de los 60 puntos que el plantel se había puesto como objetivo de la temporada. Y, además, dado el bajo nivel de puntos que tendrá el campeón, para poder decir "estuvimos cerca". Pero no pudo ser. A Argentinos le faltó claridad de juego y carácter, y terminó sucumbiendo ante un Central que, con mejor juego y mejor nivel de las individualidades, hizo negocio redondo: se llevó los tres puntos.

Ya desde el inicio se notó que el partido no iba a ser fácil para Argentinos. Porque la última línea mostraba ciertas dificultades para frenar a los jugadores visitantes que, con pelota dominada, intentaban penetrar en el área defendida por Migliore. Y, cuando los defensores recuperaban la pelota, la única vía de salida, al menos en gran parte del primer tiempo, era el pelotazo para Triverio y Boyero. ¿El mediocampo? Área de tránsito, al menos para Argentinos.

Encima, no había demasiado juego elaborado. Lucas Rodríguez fue de los que más la pidieron, pero no logró claridad. Walter Serrano, insultado cada vez que tocaba la pelota, menos. Y el Drupi Gómez, a pesar de su calidad, se empecinó en la gambeta infinita: tal vez, si hubiera jugado más asociadamente, su aporte habría sido más fructífero.

Las dificultades en defensa se hicieron evidentes cuando, tras un centro cruzado, Vittor fue directamente a chocar a Diego Lagos en la esquina del área. Maglio cobró (correctamente) penal, pero antes ambos jugadores debieron ser atendidos debido a que el golpe fue durísimo. De hecho, Diego Lagos no pudo seguir jugando, y fue retirado del campo de juego con un cuello ortopédico. Tras esta circunstancia, Sebastián Abreu pateó el penal, marcando el 1-0, cuano faltaban cinco minutos para el final de la primera etapa. Demás está decir que, tras esta acción, Maglio se ganó el repudio de toda la tribuna local, que lo despidió al finalizar el primer tiempo con un "Maglio, hijo de p..., la p... que te p...".

En el segundo tiempo, Argentinos esbozó una reacción, cuyo corolario fue el gol de Hernán Boyero, a los 5 minutos, que fusiló a Caranta tras dominar un centro pasado de pecho. A partir de allí, Argentinos le jugó de igual a igual a Central, y hasta llegó a tener un par de situaciones, pero ni Triverio ni Boyero estuvieron finos para definirlas.

Pero el destino le tenía preparado a Argentinos otro castigo. De tanto ir a buscar el gol del triunfo, se desprotegía atrás. A los 15 minutos, tras un tiro libre para Argentinos, rechazó Peppino y la pelota le cayó a Federico Carrizo, que sacó un pelotazo largo para la corrida de Walter Acuña. El juvenil delantero canalla picó y, ante la desesperada salida de Migliore, le cambió la dirección a la pelota para dejar desairado al arquero y a Nicolás Freire, que corrió detrás de la pelota con la vana esperanza de sacarla antes de que se metiera en el arco. No pudo. Central volvió a pasar al frente.

Quedaba media hora de juego, la impaciencia en la tribuna crecía y, dentro del desorden generalizado que era Argentinos, hubo tiempo para cambios. Caruso mandó sucesivamente a Cristian Maidana, Reinaldo Lenis y Raúl Becerra, aunque no logró torcer el desarollo del partido. Ninguno de los tres, en especial Lenis, de quien se esperaba más, logró hacerse manija de un equipo que abusó del pelotazo y que no pudo desnivelar pese a que la defensa de Central tampoco era de lo más segura. Quizás Caruso se haya equivocado en sacar a Lucas Rodríguez, por entonces de lo mejor del equipo, y no a Gómez, que seguía empeñado en gambetear a todo Central.

Lo cierto es que, los últimos diez minutos, el juego de Argentinos fue puro pelotazo hacia el área de Caranta. Lo tuvo Boyero tras una falla de los centrales visitantes, pero su chilena le salió débil. También pudo ser de Maidana al final, pero la mandó a la tribuna que da a la calle Gavilán.

Perdió Argentinos. Coronó, de esta manera, un torneo en el que amagó con ser protagonista, luego se cayó, y volvió a caminar a los tumbos, como quien no quiere abandonar definitivamente, pero se notó claramente que algo le faltó al equipo de Caruso. Allá lejos quedaron la fantástica victoria en el Gasómetro por 3-0 y la transitoria punta del torneo, en la fecha 6, tras ganarle a All Boys. Hoy el equipo terminó con 25 puntos, en zona de descenso, y con un Caruso Lombardi que habría presentado la renuncia al finalizar el partido.

1 comentario:

  1. No tengo nada contra Caruso, pero es lo menos que puede hacer; su teoría futbolística no tiene nada que ver con nuestra esencia de futbol, su fracaso era previsible. Si seguimos así, con Caruso nos salvamos y con Caruso nos vamos.

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